La fibra de carbono es un material compuesto por filamentos de carbono entrelazados entre sí, dando lugar a una malla con una gran resistencia a los golpes y con una sorprendente ligereza.
El número que acompaña a la letra K en el carbono de las palas de pádel hacen referencia al número de filamentos por fibra que tiene, por lo que una pala de 18K, implica que tiene 18.000 filamentos por fibra en el carbono.
Una pala de 18K es ligeramente más gruesa que una pala de 12K, lo que en teoría le debe dar más durabilidad.
En los últimos años, el uso de la fibra de carbono ha aumentado tanto en las palas de pádel que ha dado lugar al uso de diferentes tipos de fibra de carbono.
